Debido al gran interés suscitado entre nuestros lectores por el anterior artículo sobre el Madrid andalusí, continuamos con esta segunda parte donde se desgrana los posibles orígenes del topónimo “Madrid”, que aún sigue siendo debatido por los académicos a fecha actual.

EL ORIGEN DEL NOMBRE “MAŶRĪT”

El nombre árabe de Madrid, Maŷrīt, ha sido objeto de numerosos estudios filológicos y toponímicos a lo largo de varios siglos resultando varias hipótesis que señalamos a continuación:

  1. La propuesta céltica propuesta por Menéndez Pidal y su escuela que lo derivaría de un supuesto topónimo *Magetoritum
  2. La propuesta latinista, que data del siglo XVI, y que afirmaba que el nombre provendría de Mantua[1]intentando enlazar y legitimar a la ciudad actual con un ilustre pasado romano.  También, latinista sería otra propuesta que asociaba Madrid con el topónimo latino Miaccum. Sin embargo, los investigadores actuales creen que Miaccum es la mansio de El Beneficio, cerca de Collado Mediano.
  3. Otra tercera tesis sería la romance, que defienden Jaime Oliver Asín[2]  y otros autores, en la que Maŷrīt provendría del latín vulgar *Matrice(m)[3], que en mozárabe daría paso a *Matrice, y significaría “matriz de aguas”, “arroyo madre o matriz” o “manantial”.
  4. La cuarta teoría que podríamos definir como un híbrido árabe-romance afirma que Maŷrīt provendría de dos palabras:  la árabe maŷrà o “lugar por donde corre el agua” o “canalización de agua” y el sufijo latino “-etum” (sitio abundante) que evolucionaría en la lengua mozárabe a -et (-īt), dando paso a un topónimo de origen híbrido: Maŷrīt, que se traduciría como “lugar abundante de aguas que corren” (ya fueran arroyos o canalizadas).
  5. A principios del presente  siglo XXI, tenemos la propuesta del filólogo Santiago Pérez Orozco quien propone una nueva hipótesis donde Madrid derivaría de un étimo de origen latino *Macerietum (lugar abundante en muros de piedra) evolucionado desde el mozárabe.[4]
  6. La sexta y más reciente es la que defiende Eduardo Jiménez Rayado donde afirma que el topónimo de Maŷrīt derivaría de un híbrido árabe-bereber, siendo una mezcla de la ya vista palabra árabe maŷrà y el diminutivo de influencia bereber -tit (ito, ita), viniendo a significar según Jiménez Rayado, “pequeños cauces[5].

Reconstrucción según C. Abad de una aldea visigoda en el Yacimiento de Navalvillar,  Colmenar Viejo (Madrid), datado en el siglo VII d.C..  Así podría haber sido alguna de las aldeas de los alrededores de la futura Maŷrīt andalusí. Fuente foto: MadridNorte24horas.com[6]

De estas hipótesis presentadas, las tesis romance de Oliver Asín y la árabe-romance son las más aceptadas entre los estudiosos; esto ha llevado a algún autor a presuponer también, que, antes de la conquista musulmana, en lo que hoy es Maŷrīt, oen las zonas de sus alrededores, habría existido un asentamiento previo de población de origen hispanorromano o  visigodo[7], que, según creen las arqueólogas Verónica Paños y Esther Andreu estaría situado en el llamado Arroyo de San Pedro en la actual calle de Segovia y que habrían denominado esta zona con alguno de los étimos de origen latino vulgar arriba presentados.

Esta hipotética urbe romano-visigoda, no habría sido un “vicus” de gran identidad en sí, sino quizás un pequeño poblado que formaba parte de una red de aldeas que, tras la conquista musulmana de Hispania, habría configurado desde el siglo VIII en adelante, y tras la fundación en el siglo IX del hisn (castillo)  y la medina musulmanas, parte de la futura población maŷrītí local junto a los habitantes de origen árabe, bereber, muladí (converso hispano al islam) y quizás judío.

LA EVOLUCIÓN DE UN TOPÓNIMO:  DE “MAŶRĪT” AL “MADRID” ACTUAL

La primera vez que hace su aparición como topónimo en árabe Maŷrīt es en la obra de Al-Rāzī, Ajbār Muluk al-Andalus.

Reconstrucción hipotética del Madrid andalusí (s.IX-X) según Juan Cortés Marín.  Créditos: Juan Cortés Marín/EL PAIS[8]

Con la conquista cristiana y la llegada de nuevos repobladores de origen franco, mozárabe e hispánico el topónimo árabe de Maŷrīt comienza a cambiar.  Durante un tiempo, Maŷrīt y su versión román-andalusí *Matrice(m) debieron coexistir hasta la conquista cristiana.

Tras la conquista, la palabra fue adaptándose a la pronunciación de los distintos habitantes según su origen y maneras de pronunciar una u otra palabra adaptándola a su fonética.  

El Fuero de Madrid de1202 uno de los documentos más antiguos de la ciudad.  Fuente foto: Pinterest

De este modo tenemos documentadas distintas variantes para definir a la ciudad del Manzanares que se van observando en las fuentes: De  Maŷrīt /Matrice(m)*  el topónimo se escribe de un modo titubeante como Matric, Magerit Matrit para evolucionar a Madrit

Este es el caso del famoso topónimo ‘Magerit’ quizás el más conocido de los empleados en la Edad Media y que fue usado por el cronista Sampiro, obispo de Astorga, a principios del siglo XI en su narración sobre el ataque a la ciudad por el rey leonés Ramiro II en el 932, “Reinando Ramiro seguro, consultó con los magnates de su reino de qué modo invadiría la tierra de los caldeos, y juntando su ejército, se encaminó á la ciudad que llaman Magerit, desmanteló sus muros, hizo muchos estragos en un domingo, y ayudado de la clemencia de Dios, volvió á su reino en paz con su victoria.”

Y desde estas titubeantes variantes el topónimo Magerit (Matrit o Matric) evolucionó al topónimo actual de Madrid que es como conocemos en la actualidad a la capital de España.

DOS MAŶRĪTÍES ILUSTRES

La ciudad andalusí de Maŷrīt conoció una época de gran prosperidad hasta su conquista en época taifa.  No sólo fue un centro militar o gubernamental de primer orden, sino que entre sus murallas habitaron numerosos personajes destacados de la historia científica, política y cultural de Al-Ándalus

De todos los maŷrītíes que tenemos documentados por las fuentes árabes o cristianas altomedievales, recordaremos brevemente a dos:  Abū-l-Qāsim Maslama al-Maŷrītī[9]y San Isidro Labrador[10].

Maslama al-Maŷrītī (Madrid, 950 – Córdoba, 1007). Fue matemático, astrónomo y astrólogo y uno de los grandes intelectuales de la etapa final del Califato de Córdoba.  Se le llamó el “Euclides de España”.  Tradujo el Planisferio de Ptolomeo, trabajo a la Península  a Al-Juarizmī y posiblemente fue el autor de los libros: El Tratado del Astrolabio y  el Ghāyat al-Ḥakīm (“El propósito del sabio”), un tratado de magia y astrología conocido como Picatrix en la España medieval. Fue también consejero y astrólogo personal de Almanzor y se dice que llegó a predecir el final del Califato de Córdoba.  Posiblemente tuvo una hija llamada Fátima que continuó sus trabajos científicos, pero no tenemos testimonio que demuestren su existencia[11].

En su honor, en 2015, la Unión Astronómica Internacional bautizó como Majriti a uno de los planetas extrasolares que orbitan la estrella Titawin.

San Isidro Labrador (Madrid, 1080 – Madrid, 1130). Fue el patrón de los agricultores, de la actual Madrid y de numerosas ciudades y pueblos del orbe católico. No conocemos casi nada de su vida salvo unos detalles escasos del conocido como Códice de Juan Diácon (s.XII-XIII) o, hallado en la Iglesia de San Andrés en 1504. En dicho códice se le llama Ysidorus Agricola, se nos menciona que está casado, con un hijo y que fue el autor de cinco milagros.  

Parece que era de origen mozárabe y según las investigaciones forenses realizadas en su momia, habría tenido físicamente rasgos norteafricanos[12], posiblemente como resultado de un intenso mestizaje como señala Castellanos Oñate[13], lo que no sería de extrañar dada la variedad de etnias que habitaban en el Maŷrīt andalusí. 

Un argumento a favor de este origen bereber es la tesis que defiende Matilde Fernández, Montes, investigadora del CSIC, quien, en un estudio pormenorizado[14] sobre la figura de San Isidro en el Códice de Juan Diácono, compara al santo madrileño con las biografías de los santones sufíes bereberes de la época encontrando interesantes paralelismos con éstos. Fernández Montes cree que esta fuente cristiana del siglo XIII pudo recoger la vida y milagros de un santón sufí casi legendario de los siglos XI-XII, cuya vida y milagros se transmitieron solamente por tradición oral y que habría sido discípulo de un sufí toledano llamado Ibn Chueco[15].

 

A izquierda, manuscrito árabe oriental del siglo XIII que ilustra lo que era el trabajo de astrónomo que pudo hacer Maslama al-Maŷrītī[16].  A derecha, reconstrucción forense del rostro de San Isidro Labrador, según el estudio hecho a la momia por expertos forenses de la Universidad Complutense de Madrid). Como podemos observar, tiene rasgos africanos muy notables.

BIBLIOGRAFÍA CITADA Y RECOMENDADA

ÁVILA, María Luisa, "Personajes del Madrid islámico", en GIL FLORES, Daniel (ed.), De Maŷrit a Madrid. Madrid y los árabes, del siglo IX al siglo XXI, Madrid/Barcelona: Casa Árabe/Lunwerg, 2011, pp. 54-65.

CASTELLANOS OÑATE, José Luis (2019). “Isidro de Madrid. Santo mozárabe”. La Gatera de la Villa, 35 (Verano 2019), p. 5-8

FERNANDEZ MONTES, Matilde (1999). “Isidro, el varón de Dios, como modelo de sincretismo religioso en la Edad Media”. Disparidades. Revista De Antropología54(1), 7–51

GIL-BENUMEYA, Daniel. El Madrid islámico. La historia recuperada. Madrid: Madrid Destino. Cultura, Turismo y Negocio, 2018. 

JIMENEZ RAYADO, Eduardo (2020). “La construcción de la identidad a través del territorio en la Edad Media. El origen bereber del nombre de Madrid” en Medievalismo, 30, 2020: Madrid. Universidad Rey Juan Carlos,

LORENZO ARRIBAS, Josemi (2011). Entrada “Mantua Carpetanea” en “Gran Enciclopedia Cervantina”, Carlos Alvar (dir.), Alcalá de Henares, Castalia/Centro de Estudios Cervantinos.  Disponible online en: (11) Mantua Carpetanea (Madrid) | Josemi Lorenzo Arribas - Academia.edu

OLIVER ASIN, Jaime (1959. Reed 1991). Historia del nombre Madrid. AECID. Madrid

PAÑOS CUBILLO, Verónica Paños Cubillo y ANDREU, Esther Andréu (2011). “Tumba visigoda entre la plaza de la Armería y la Catedral” en Revista La Ilustración (nº 19)

PEREZ OROZCO, Santiago (2007). “El origen del topónimo Madrid en  Anales del Instituto de Estudios Madrileños, Nº. 47,  2007, págs. 701-704

 

[1] Cfr. LORENZO ARRIBAS, Josemi (2011). Entrada “Mantua Carpetanea” en “Gran Enciclopedia Cervantina”, Carlos Alvar (dir.), Alcalá de Henares, Castalia/Centro de Estudios Cervantinos.  Disponible online en: (11) Mantua Carpetanea (Madrid) | Josemi Lorenzo Arribas - Academia.edu

[2] OLIVER ASIN, Jaime (1959). Historia del nombre Madrid. CSIC. Madrid, p. 101 y 128

[3] Colocamos la palabra en latín con asterisco inicial dado que es una posible reconstrucción no una palabra exacta.

[4] PEREZ OROZCO, Santiago (2007). “El origen del topónimo Madrid”, Anales del Instituto de Estudios Madrileños, Nº. 47,  2007, págs. 701-704

[5] JIMENEZ RAYADO, Eduardo (2020). “La construcción de la identidad a través del territorio en la Edad Media. El origen bereber del nombre de Madrid” en Medievalismo, 30, 2020: Madrid. Universidad Rey Juan Carlos, p. 297

[6] Link: El Yacimiento de Navalvillar de Colmenar Viejo cobra vida (madridnorte24horas.com)

[7] Esto quedaría demostrado por la arqueología con el hallazgo de la lápida funeraria de un joven visigodo en fechas recientes en la zona donde se cree que tuvo lugar la fundación andalusí de Madrid. Cfr. PAÑOS CUBILLO, Verónica Paños Cubillo y ANDREU, Esther Andréu (2011). “Tumba visigoda entre la plaza de la Armería y la Catedral” en Revista La Ilustración (nº 19)..  También otra prueba pero de la que tenemos solo el testimonio escrito, es la alusión de una lápida visigoda hallada en  en el claustro de la desaparecida iglesia de Santa María datada en el año 697 (calle Mayor) que demuestra que originariamente pudo ser construida sobre una basílica visigoda.

[8] Enlace: árabe Las huellas del Madrid islámico: Las huellas del Madrid islámico | Fotos | Madrid | España | EL PAÍS (elpais.com)

[9] Cfr.  ÁVILA, María Luisa, "Personajes del Madrid islámico", en GIL FLORES, Daniel (ed.), De Maŷrit a Madrid. Madrid y los árabes, del siglo IX al siglo XXI, Madrid/Barcelona: Casa Árabe/Lunwerg, 2011, pp. 54-65.

[10] Cfr. CASTELLANOS OÑATE, José Luis (2019). “Isidro de Madrid. Santo mozárabe”. La Gatera de la Villa, 35 (Verano 2019), p. 5-8

[11] MARIN, Manuela, "Arabismo en Madrid", en GIL FLORES; Daniel Gil(ed.), De Maŷrit a Madrid. Madrid y los árabes, del siglo IX al siglo XXI, Madrid/Barcelona: Casa Árabe/Lunwerg, 2011, p. 191.

[12] SANTOS MOYA, Aitor (2022). ABC. Varón, de entre 35 y 45 años y con rasgos africanos: el verdadero rostro de san Isidro Labrador, patrón de Madrid (abc.es)

[13] CASTELLANOS OÑATE, José Luis (2019). “Isidro de Madrid. Santo mozárabe”. Art. Cit., p. 8

[14] Cfr. FERNÁNDEZ MONTES, Matilde (1999). “Isidro, el varón de Dios, como modelo de sincretismo religioso en la Edad Media”. Disparidades. Revista De Antropología, 54(1), 7–51

[15] FERNANDEZ MONTES, Matilde (1999). “Isidro, el varón de Dios, como modelo de sincretismo religioso en la Edad Media”. Disparidades. Revista De Antropología54(1), 7–51

[16]Fuentes fotos: Izquierda, Wikipedia.  Derecha, ABC Enlace: [email protected] (758×531) (abcstatics.com)

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