Piel de oso para signifer

El signifer era el legionario que portaba algún tipo de signum en el ejército romano. El signifer se escogía entre los legionarios mas veteranos de la unidad, por sus méritos o experiencia, siendo un puesto ocupado muy frecuentemente por reenganchados, bastante mayores en edad. Durante el Imperio Romano hubo varios tipos de signifer, desde el simple portaestandarte de una centuria, pasando por vexilarius, imaginifer o draconarius al final del Imperio.

Se excluye de esta categoría al Aquilifer, por tener un rango especial que los convertía en la élite de los signíferos, al existir uno por legión y ser su número muy contado en todo el Imperio. Los aquilíferos se cubrían exclusivamente con pieles de león.

El signifer sin embargo se cubría con pieles de diversos animales totémicos según su rango. Esta especie de manto respondía a razones religiosas, pero también conllevaba un significado a nivel de imagen y rango. Impresionar al enemigo con hombres que aparentaban animales salvajes nunca estaba de más.

Entre estos animales, el oso era uno de los mas espectaculares y costosos. Ignoramos si era el propio soldado el que tenía que costearse la piel, pero es probable que así fuera, con lo que solo los mas comprometidos o de legiones mas prestigiosas, buscarían llevar su insignia cubiertos con la piel del oso pardo, un animal mucho más frecuente en Europa de lo que es actualmente.

Esta piel de oso completo se realiza con materiales sintéticos. No es por tanto natural ni procedente de la taxidermia de la piel de un oso real, es completamente respetuosa con el medio natural y evita los problemas inherentes a las pieles naturales (permisos, conservación, olores, etc). Realizada de forma artificial, consigue una perfección casi total, siendo muy difícil distinguirla de las pieles reales y consiguiendo un efecto impresionante.

Características:

• Largo aprox. 180 cm
• Ancho de zarpa a zarpa aprox. 167 cm
• Cabeza de 34 cm aprox.
• Peso aprox. 4,5 kg.

FABRICADO EN ESPAÑA