La toga romana masculina no sólo fue una prenda de vestir, sino un reflejo de la identidad y la estructura social romana.  En el presente artículo haremos un repaso de su historia, evolución y modelos de prendas durante la Antigüedad

DEFINICIÓN Y ORIGEN DE LA TOGA Y SU IMPORTANCIA EN LA SOCIEDAD ROMANA

La toga básica que conocemos era una prenda que se caracterizaba por ser una pieza de tela rectangular larga y bordes redondeados o semicirculares, que se enrollaba alrededor del cuerpo. 

Reservada inicialmente a cualquier ciudadano varón, con el tiempo como veremos a continuación, se convirtió en un símbolo de estatus social y ciudadanía que perdió su rol de simple indumentaria para el día a día para dar paso una prenda de alto rango social, compleja y con muchas variantes. 

Antes de pasar a hablar de la toga en sí es necesario ir a los orígenes de esta indumentaria que van paralelos también a los orígenes mismos de la ciudad de Roma.

MARCO HISTÓRICO DE LA ÉPOCA MONÁRQUICA (753 a.C. - 509 a.C.)

En esta época vemos a varios pueblos coexistiendo entre sí en la Italia peninsular destacando de entre ellos los etruscos y los latinos. 

Los etruscos habitaron inicialmente en el área de lo que hoy es Toscana, los Montes Apeninos y las cuencas de los ríos Arno y Tíber.  Posteriormente, se expandieron hacia el centro y norte peninsular de Italia.

Herodoto de Halicarnaso, historiador y geógrafo (484-425 a. de C.) afirmó que los etruscos eran de origen asiático; en cambio, Dionisio, también de Halicarnaso, lo desmintió, aseverando que siempre habían vivido en el norte de Italia.

Casi coetáneamente a los etruscos tenemos a los latinos, surgidos con la fundación mítica de Roma por Rómulo en el 753 a.C.  Durante dos siglos, durante el llamado periodo monárquico de Roma, gobernaron siete monarcas hasta la expulsión de Tarquinio el Soberbio en el 509 a.C.

Estas monarquías latinas fueron vitalicias, elegidas por los romanos según los autores clásicos por sus virtudes y carisma para gobernarlos, no por su ascendencia noble.

En esta época, además, se establecieron las primeras leyes y cargos públicos romanos (Senado, Curia, prefecturas, etc…), se construyeron los primeros monumentos de Roma y se amplió el territorio a costa de otras regiones vecinas.

 

Mapa de la Península Itálica hacia el 500 a. de C., antes de expansionarse Roma por toda Italia.  Fuente foto: Pinterest

1. LAS INFLUENCIAS GRIEGA ARCAICA, ORIENTALIZANTE Y ETRUSCA

No podemos entender lo que será lo que será la moda romana de época monárquica sin entender las influencias etruscas y a través de éstas, las de origen griego arcaico y algunas que podríamos denominar “orientalizantes”, del Oriente Próximo[1]

Prendas de origen foráneo como el quitón (túnica básica griega), el himatión o las sandalias con ligaduras alrededor de la pierna se adaptaron a la moda romana, en una versión más austera y menos solemne, según algunos autores romanos, que contrarrestaba con el lujo presente en la moda etrusca.

2. PRIMERAS FORMAS Y MATERIALES: LA TEBENNA Y LA TOGA PRAETEXTA PRIMITIVA

De una prenda típicamente etrusca, la tebenna, derivará lo que será la futura toga romana, un atuendo que inicialmente fue usado por mujeres y hombres, aunque más por éstos últimos.

En el caso de los hombres, tal como podemos ver en la iconografía de algunas tumbas y esculturas etruscas, podía llevarse encima del quitón[2] de manga corta o bien sin él, sobre el cuerpo desnudo.

Hombre etrusco llevando la tebenna con la punta cayendo sobre la espalda. La tea aquí está sin teñir pero lleva ribetes dorados y rojos. Fuente: Pinterest

La tebenna era una prenda larga con una forma que aún es discutida por los historiadores.  Se cree que en este periodo pudo tener inicialmente una forma rectangular a partir de modelos griegos y no semicircular. Esta prenda pudo estar hecha en lana, aunque para estaciones más calurosas se habría fabricado también en lino. La tebenna podía estar o no rematada con un ribete o bordado de otro color.

A la hora de vestir, la tebenna se podía llevar colgada del hombro o bien, en modo drapeado, con los extremos echados sobre los hombros y dejándolos caer sobre la espalda.

Otro modelo de ropa tipo toga que veremos usado será la toga praetexta que aparece en época monárquica a partir del tercero de sus reyes, Tulio Hostilio (670-c. 638 a. C.), y cuyo uso continuará durante la época republicana. Se trataba de una pieza de lana blanca con una franja o cinta teñida de color púrpura.  Fue usada por los aristócratas y los magistrados etruscos.

TIPOS DE TOGAS EN LA ÉPOCA MONÁRQUICA

  • TOGA PRIMITIVA

Como se ha dicho arriba, de la tebenna etrusca, un amplio manto semicircular de lana o tal vez de lino (para épocas del año más cálidas), derivó la toga primitiva romana que en sus inicios fue una prenda unisex, pero que, con el tiempo, se volvería una prenda únicamente masculina.

Se vestía sobre el cuerpo desnudo entre los varones, aunque también sobre una túnica simple o de tipo griego (quitón).

Una versión más elaborada y adornada la habrían vestido los estamentos militares y los cargos públicos al servicio del rey.

El dios Vertumno (Bronce. 500 a.C.) llevando la tebenna o antecedente de la toga romana en el hombro izquierdo sobre el quitón.  Se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de Florencia, Italia.

  • TOGA REAL

Derivada de la anterior de uso civil, este modelo derivado de la toga primitiva habría sido más elaborado y rico.  No sabemos si tuvo forma rectangular o semicircular, pero fue una prenda especial ligada a los reyes romanos como Rómulo, de quien una tradición escrita afirmaba que era una de sus vestimentas preferidas.

En general, esta prenda fue usada por todos los monarcas romanos en eventos públicos y ceremonias oficiales. Además de esta toga real, los reyes usaron un calzado rojo, y una diadema plateada sobre la cabeza como insignias y expresión de su estatus real[3].

Con el tiempo, también algunos cargos importantes de la administración etrusca y romana como los magistrados adaptarían esta toga como atavío institucional[4], siendo la posterior toga picta republicana romana una posible evolución de esta prenda.

MARCO HISTÓRICO DE LA REPÚBLICA ROMANA (509 A.C. - 27 A.C.)

Una vez depuesto Tarquinio el Soberbio, se instauró la República que fue progresivamente gobernada por pretores primeramente y luego por cónsules nombrados por el Senado. En esta etapa Roma se expande por toda la península itálica y desde ahí a todo el Mediterráneo enfrentándose con potencias como Cartago y las polis griegas. Finalmente, casi todo el Mar Mediterráneo y partes de la actual África, Europa y Asia pasan al dominio de Roma.

Expansión de Roma desde la época republicana hasta Trajano. Podemos ver en diferentes colores la evolución desde su solar en el Latium itálico hasta las conquistas de Octavio Augusto que es el periodo que tratamos en el artículo. Fuente: R. Laguna. Tomado de este enlace[5]

1)      LA EVOLUCIÓN DE LA TOGA DURANTE LA REPÚBLICA

Durante la República, la toga pasó a ser una prenda predominantemente masculina, y salvo algunas excepciones[6], fue perdiendo poco a poco su carácter de vestimenta popular para ser asumida por los altos mandos civiles y militares y por  la aristocracia con una finalidad religiosa, ceremonial y festiva. 

A partir de siglo III a.C., tras la llegada de ciertas influencias de tipo helenístico que afectaron a la moda romana (especialmente en la femenina), se le dio una mayor importancia y valor a la toga que empezó a ser considerada como una de las mejores manifestaciones del mos maiorum (literalmente, “costumbres de los ancestros”).

Según la arqueóloga Ursula Rothe[7], la toga encarnó uno de los símbolos más característicos de la romanitas (la identidad, costumbres y virtudes romanas) frente a las influencias foráneas de Grecia y del Oriente, culturas que, según los romanos, eran dadas al vicio y la molicie a causa del lujo de sus prendas. Para preservar estas virtudes en el vestir, se promulgaron una serie de leyes suntuarias que trataron de regular, en vano, el uso de elementos lujosos en las indumentarias.

Es en este momento cuando la toga adquirió un nuevo estatus social y de prestigio y comenzó a evolucionar hacia todo un surtido de prendas similares que variaron en tamaños, formas de vestir y colores según el propósito, clase social y edad de su portador. Así, aparecieron la toga virilis, la praetexta, la candida, la pulla y la picta

La toga con el tiempo adquirió tal notoriedad y se consolidó de tal modo no sólo como símbolo social sino como prenda nacional de Roma que los autores grecorromanos como Virgilio y Estrabón definieron a los ciudadanos y élites romanas y no romanas que las llevan como togata gens o togati (en singular, togatus).

2)      CAMBIOS EN EL DISEÑO Y MATERIALES

En época republicana, tal como atestiguan autores como Dionisio, Quintiliano o Tertuliano apareció la toga de tipo más amplia que conocemos por las fuentes romanas y que desplazó a la posiblemente rectangular de época monárquica en un nuevo diseño que amplió las medidas de la tela inicial para conseguir que la pieza pudiera enrollarse y drapearse de modo más estético y armonioso alrededor del cuerpo.

Aunque se ha admitido un patrón semicircular para reconstruir la toga, según las más recientes investigaciones hechas a partir del estudio de las estatuas, parece ser que la toga pudo ser una pieza de tela de 6 a 8 metros de ancho por entre 2 y 3 de alto de forma semitrapezoidal y el lado superior ligeramente curvado.

Patrón de una toga praetexta y manera de vestirla enrollándola alrededor del cuerpo, según las últimas investigaciones.  Como vemos, este patrón tiene una forma trapezoidal y ligeramente circular en la parte del borde de color rojo.  Fuente: Enlace[8]

Este modelo de toga se vestiría colocando un extremo de la tela con el borde exterior sobre el hombro izquierdo de su portador y después se daban alrededor del cuerpo varias vueltas o pliegues que se corregían y marcaban, lo que se conseguía un efecto estético de distinto tamaño y forma que constaba de las siguientes partes[9]:

  • UMBO:  Un bulto de tela que se formaba al ajustar la toga en la cintura usado como una especie de bolsillo.
  • SINUS: La parte de la toga que formaba en el pecho un pliegue colgando.
  • BALTEUS: La banda o “cinturón” que resultaba de enrollar la tela de la toga alrededor del cuerpo de su portador.
  • PERQUAM BREVIS: La parte frontal superior ubicada por encima del umbo. 

 

Partes de una toga de época republicana y altoimperial.  Fuente foto: Pinterest

Otro modo de vestir la toga era el cinctus gabinus, que consistía en ahuecar la parte trasera y pasarla sobre la cabeza a modo de capucha. Esta manera de vestir generalmente se utilizaba en ritos religiosos o por el cónsul para declarar la guerra. Esta era también la manera de vestir la toga del pontifex maximus durante los rituales religiosos.

A la hora de vestir la toga no se usaron fíbulas o broches para sujetarla mejor, aunque algún autor cree que sí se usaron pesos o cinturones cosidos interiormente para montar y conservar los pliegues y la forma de la toga. 

La complejidad en vestir la prenda y la gran cantidad de tela hacían necesaria la presencia de esclavos especializados llamados vestiplicus en vestir esta prenda a su señor.

Por último, fue tradición familiar hasta la época de Augusto que las matronas patricias y sus hijas aprendieran el arte de tejer la lana para hacer las togas que vestían sus maridos e hijos.  Esta costumbre perdió vigencia ya entrada la época imperial.

La toga no admitía otro material que no sea la lana[10], un material muy accesible y de costo asequible; el uso de otros tejidos y adornos lujosos se vieron como inadecuados para los valores y la virtus de un ciudadano romano por parte de los literatos e historiadores latinos.

3) INFLUENCIA DE LA TOGA EN LAS CONQUISTAS Y EL COMERCIO: EL CASO HISPANO

La toga se difundió desde la península itálica a los nuevos dominios del Imperio Romano como parte del proceso conocido como ‘romanización’ por el que los pueblos conquistados o aliados asumen la costumbres, lengua, arte y cultura romanas.  Entre estas costumbres estará la adopción de la indumentaria[11].

En la Hispania romana, la toga comenzó a estar ya presente desde una fecha temprana, cuando Tito Livio enumera los incentivos que recibían por sus servicios en el 205 a. de C. las tropas romanas que combatían en la Península tales como una doble paga, trigo para 6 meses, túnicas y togas[12]

Posteriormente, Plutarco, nos comenta que ya en época de Sertorio que los niños y jóvenes íberos de la aristocracia local de Osca (hoy, Huesca) vistieron unas túnicas que son interpretadas por el estudioso Luis Baena[13] como togas praetextae.

4) TIPOS DE TOGAS DURANTE LA REPÚBLICA

  • TOGA PRAETEXTA

Usada por niños y magistrados (y otros cargos curules) en época republicana estaban rematadas por un borde teñido en púrpura que indicaba el estatus social de su portador.

Los niños y niñas de clases altas y aristocráticas vestían esta prenda durante toda su infancia hasta que alcanzaban la pubertad (14 en los niños y 12 en las niñas).  Usada en edad infantil, remarcaba en el caso de los varones su protección por la ley romana y en especial, su proceso de transición a la vida adulta como ciudadanos.

En el caso de los magistrados (y otros funcionarios curules), esta prenda subrayaba el carácter sagrado de sus cargos y su rol en la administración de justicia y en la vida política y religiosa.

  • TOGA VIRILIS

A diferencia de la praetexta antes señalada, era una toga de lana de color blanco y sin adornos ni tinturas. Era vestida por los jóvenes varones romanos tras alcanzar la pubertad y marcaba su entrada en la vida pública romana a través de un rito de paso presidido por la diosa Juventus.

Era también una prenda vestida por cualquier ciudadano romano (plebeyo o patricio) y vestirla significaba alcanzar la ciudadanía romana y acceder la vida pública pudiendo ejercer cargos públicos en la administración republicana y en el servicio militar.

Tipos de toga usadas por los varones romanos en época romana e imperial. Fuente: Pinterest

  • TOGA CÁNDIDA

Una toga de color muy blanco (“candidus” en latín significa brillante) conseguido a base de un tratamiento intensivo con polvo de tiza. Fue usada por los candidatos a cargos públicos.  De este tipo de toga deriva la palabra actual ‘candidatura’, como acto de presentación a unas elecciones.

  • TOGA PULLA

Era una prenda realizada en lana teñida en color gris muy oscuro[14] o bien tejida a partir de la lana virgen de ovejas de color negro o marrón.  Fue prenda llevada por los deudos y dolientes de un difunto en espacios privados o en ámbitos públicos tales como la muerte de un personaje famoso o en tragedias que afectasen a Roma. 

Sin embargo, aunque se usó como prenda (al menos en un ámbito privado), se fomentó en el ámbito público el uso de otras togas más formales como la toga viril o la praetexta (siempre que ocultasen su parte teñida o bordada de púrpura del revés) en estas ceremonias y duelos.  Autores como Tácito y, sobre todo, Cicerón nos hablan de ellas. 

  • TOGA PICTA

Se trataba de una toga teñida completamente en tono púrpura a partir del múrex, un molusco y rematada en un borde dorado, que pudo ser según que autores, un bordado en oro o una cinta dorada cosida sobre la tela.  También, sobre esta misma tela pudieron pintarse a mano figuras y cenefas.

Aunque hay antecedentes durante de su uso durante la época etrusca y en la monarquía romana pre-republicana del empleo de prendas teñidas en púrpura entre sus dirigentes, parece que poco a poco su uso llegó a la Roma republicana por contacto con los reinos helenísticos y orientales.

En época republicana, fue llevada por los cónsules y por los generales que paseaban en Roma en su paseo triunfal (triumphus) tras una campaña.

También llevaba una toga picta la estatua de Júpiter Optimus Maximus en el templo del Capitolio en Roma.

Posible toga picta.  Procedente de la llamada tumba etrusca de Francisco en Vulci.  Algunos expertos creen que es una toga picta por la decoración. Sin embargo, otros rebaten esta teoría a causa de sus bordes rectangulares. Foto: Wikipedia /CC

  • OTROS TIPOS DE TOGA

Parece que en esta época tendríamos otro tipo de prendas similares a togas, aunque con otros colores y patrones.  Entre ellas, destacó la trabea, llevada por los caballeros équites del ejército romano y que más que toga pudo ser una especie de tela envolvente y la laena, que según Suetonio sería una túnica doble. Habría sido una especie de manto grande vestido por los sacerdotes flámines, doblado por la mitad y sujeto por un broche.

Procesión de sacerdotes flámines con sus mantos y sus característicos gorros.  Vemos aquí también a un par de personajes con una toga llevada en modo cinctus gabinus o capucha en la cabeza.  Fuente foto: Wikipedia/CC

BIBLIOGRAFIA

AVIAL CHICHARRO, L. (2018). Breve historia de la vida cotidiana del Imperio romano. Madrid: Nowtilus.

BAENA DEL ALCAZAR, Luis (1993). “Togati Hispaniae. Aproximación al estudio de esculturas de togados en Hispania” en Baética: Estudios de Historia Moderna y Contemporánea. Nº 15, 1993, pp.165-174

CARCOPINO, J. (2001). La vida cotidiana en Roma en el apogeo del Imperio. Madrid: Temas de Hoy.

GIANNINI, Federico – BARATTA, Ilaria (2018). “¿Cómo vestían los etruscos? Moda y vestimenta en la Toscana de hace 2.600 años.” En ¿Cómo vestían los etruscos? Moda y vestimenta en la Toscana de hace 2.600 años

GONZÁLEZ GARCÍA, G.  y  LÓPES BARJA DE QUIROGA, P.  (2011). “La estela  de Crecente: reflexiones sobre el proceso romanizador en la Galicia antigua”, [en] P. Bueno Ramírez (coord.), Arqueología, sociedad, territorio y paisaje: estudios sobre Prehistoria  reciente,  Protohistoria  y  transición  al  mundo  romano  en  homenaje  a  Mª  Dolores  Fernández  Posse,  Madrid,  2011,  349-360).

ROTHE, Úrsula (2019). The Toga and the Roman identity. Londres y Nueva York: Bloomsbury Academic.

SEBESTA, J. L. (1994b). “Tunica Ralla, Tunica Sprissa: The Colors and Textiles of Roman Costume”. En SEBESTA, J. L.; BONFANTE, L., eds. The World of Roman Costume. Studies in Classics (en inglés). University of Wisconsin Press. pp. 65-76.

STONE , S. (1994). “The Toga: From National to Ceremonial Costume”. En SEBESTA, J. L.; BONFANTE, L., eds. The World of Roman Costume. Studies in Classics (en inglés). University of Wisconsin Press. pp. 13-45.

[1] El periodo de moda que tocamos comprendería los que llama la estudiosa italiana  Larissa Bonfante denomina el orientalizante (aproximadamente del 650 al 550 a.C.) y el jónico  (550-450 a.C).  Además de una influencia etrusca se cree que pudo haber otras como las de la zona de Lidia (actual Anatolia). Véase: GIANNINI, Federico – BARATTA, Ilaria (2018). “¿Cómo vestían los etruscos? Moda y vestimenta en la Toscana de hace 2.600 años.” En ¿Cómo vestían los etruscos? Moda y vestimenta en la Toscana de hace 2.600 años [Consultado el 23/09/2024] 

[2] El quitón (del griego χιτών), era una prenda de origen griego que consistía en una pieza de tela de forma rectangular, y se colocaba alrededor del cuerpo: para sacar el brazo derecho por el lado cerrado se practicaba una abertura. Sobre el hombro izquierdo se ataban los dos extremos del lado abierto, mediante unas fíbulas.

[3] Además de los atributos reales de indumentaria, otros honores a los que tenía derecho el monarca romano eran el ser acompañado por los doce lictores portando los fasces con el hacha y el privilegio de sentarse en la silla curul.  Estos fasces y el hacha simbolizaban el imperium o el poder de mando y autoridad para gobernar que recibía el rey de Roma proveniente de los dioses.

[4]Posiblemente, esta prenda pudo haber sido una variante de la toga praetexta  ya que posteriormente la llevarían también algunos magistrados.  Pero la separamos de la toga praetexta por su uso solamente por el rey.

[5] Enlace: Profesor de Historia, Geografía y Arte: Mapas del Imperio Romano

[6] Hubo una toga vestida por mujeres:  un modelo para niñas de menos de 12 años y otro, la toga mulieris, vestida por prostitutas y mujeres adúlteras.

[7] Véase ROTHE, Úrsula (2019). The Toga and the Roman  identity. Londres y Nueva York: Bloomsbury Academic.

[8] Enlace foto:veste.jpg (550×590)

[9] Quintiliano nos describe así el proceso de vestir la toga y las partes que se formaban con sus pliegues y drapeados: “Después de doblar la tela en dos partes desiguales en sentido de la longitud, se hacía bajar por delante un borde desde el hombro izquierdo, se pasa por debajo del brazo derecho y lo que queda, una vez hecho el sinus (pliegues de la parte central), se tira sobre el brazo u hombro derecho. La parte anterior queda perfectamente a media pierna, la posterior un poco más alta de la cintura. El sinus queda bien por encima del cinturón de la túnica y nunca por debajo. La parte que queda detrás debe ser más corta para sentarse mejor. No es conveniente cubrir el hombro y todo el cuello, pues así queda el vestido demasiado ajustado

[10] Había dentro de la lana distintos espesores para ser llevados en invierno y verano.  Las telas menos espesas y más ligeras se dejaban para la época cálida, especialmente el verano.

[11] En Hispania, la romanización comenzó por las clases más altas de la sociedad peninsular comenzando en una primera etapa por la aristocracia local y la llegada desde Italia (itálicos).  Los hispanos de clases más bajas continuaron con sus modos de venir tradicional hasta que a partir de época imperial con las concesiones de ciudadanía romana la toga fue poco a poco imponiéndose hasta decaer su en época bajoimperial y tardorromana, como se verá.

[12] BAENA DEL ALCAZAR, Luis (1993). “Togati Hispaniae. Aproximación al estudio de esculturas de togados en Hispania” en Baética: Estudios de Historia Moderna y Contemporánea. Nº 15, 1993, pp. 168-169

[13] BAENA DEL ALCAZAR, Luis (1993). “Togati Hispaniae. Aproximación al estudio de esculturas de togados en Hispania”, art. cit., p. 170

[14] En esta época, era imposible conseguir en teñido el color negro total consiguiéndose sólo tonalidades de gris muy oscuro. Esto no será posible hasta bien entrado el siglo XVI.

Dejar un comentario

Iniciar sesión


Categorías

arrow_upward