

Par de grebas romanas altas.
Las grebas (ocreae) eran las protecciones de las piernas del guerrero desde la rodilla hasta el tobillo. Hacen las veces de lo que hoy conoceríamos como espinilleras. Eran usadas desde mucho antes que Roma comenzara su expansión, por pueblos como los griegos y etruscos, con los que la joven Roma mantuvo contacto frecuente.
Los modelos más antiguos estaban hechos en bronce, muy caro y pesado, por lo que los romanos comenzaron a realizarlas en acero, que facilitaba su uso, aunque requería el mantenimiento propio contra la oxidación. A lo largo del Imperio, la greba fue cayendo en desuso. Sobre el siglo II d.C., ya era un complemento reservado a los oficiales, estando entre la tropa mas extendido el uso de una sola greba, en la pierna izquierda, la que se adelantaba junto al escudo y quedaba mas expuesta a lesiones.
Estas grebas, de estilo griego antiguo, están fabricadas en latón de 1,5 mm, a imitación del bronce del que estaban elaboradas las originales, un complemento arcaizante muy del gusto de los oficiales romanos. Es por tanto muy adecuada para recrearlos, de centuriones en adelante. Su protección se extiende a la rodilla.
Este modelo se sustenta en la pierna a base de correas con hebillas, necesarias dado el mayor peso de este tipo de grebas. Completamente forradas en cuero por el interior, además de bordeadas de cuero. Requiere menos mantenimiento contra oxidación que versiones en acero.
Características:
Fiche technique